
Hace unos meses recibí una invitación de Proyecto Aldea Global -una ONG dedicada a la alfabetización, salud comunitaria, supervivencia de niños, proyectos de seguridad alimentaria, medio ambiente y desarrollo agrícola- para visitar la aldea San Lorenzo, en el productivo Valle Arriba del río Aguán, cercano a la ciudad cívica de Olanchito, en el Departamento de Yoro, Honduras.

Compartimos maravillosos momentos con los habitantes del lugar, dedicados en su mayoría a las tareas del campo. Personajes como El Cute, un excelente domador de caballos, hicieron de la visita una experiencia extraordinaria.

Sin embargo, el propósito principal de la visita era admirar por primera vez el Amazilia luciae, el famoso colibrí esmeralda, la única ave endémica de Honduras. Al decir endémica indicamos que se encuentra exclusivamente en ese bello país de Centroamérica, que ha sido mi hogar durante los últimos 15 años.

Para ello fuimos a su biotopo, ubicado en el polígono de tiro de la Fuerza Aérea Hondureña -que alguna vez fue un aeródromo-, cercano a la ciudad de Olanchito. Un biotopo es una zona con condiciones ambientales uniformes que provee espacio vital a un conjunto de flora y fauna. Sólo estando en el lugar pude entender por qué este pequeño picaflor de rutilantes colores puede observarse casi exclusivamente allí.

Se trata de un bosque tropical muy seco (ultraseco, si se permitiera la expresión) en el valle del río Aguán que ofrece un panorama totalmente diferente al resto de Honduras, pues está poblado de cardos, cactus y arbustos capaces de sobrevivir en situaciones de extrema sequedad. Obviamente forma parte de un área protegida, que atrae a visitantes de diversas partes del mundo. No se puede ingresar sin previo aviso, pues se exige un permiso emitido por las autoridades.

EL COLIBRÍ ESMERALDA
Este colibrí, cuyos macho y hembra son muy parecidos, mide unos 10 cm; Se caracteriza por un color azul turquesa rutilante en la zona que va de la garganta a la parte superior del pecho, aunque en ocasiones adquiere un color más grisáceo; en la hembra el brillo de la gorguera suele ser menos intenso.

La corona, nuca, dorso y flancos son color verde esmeralda; sus plumas cobertoras son oscuras con borde blanco, aunque en el área superior son más verdosas; la mitad inferior del pecho y el vientre son blancuzcos. Emite un zumbido con las alas, las cuales mueve con mayor rapidez que cualquier otra ave.

La cola tiene una hendidura y a veces parece levemente bifurcada. El pico es de color gris oscuro y está muy levemente curvado, con su sección inferior de color rojizo opaco. Una marca de campo característica es la mancha postocular blanca.

En el biotopo que visitamos su principal alimento proviene del Pie de Niño (Pedilanthus camporum), una especie que florece todo el año.

El colibrí esmeralda también se alimenta de insectos. Anida en marzo y abril y sus pequeños nidos son hechos de musgos y líquenes, poniendo en ellos casi siempre dos huevos. Las crías son alimentadas por la pareja[1].
Se observa con facilidad, pues le gusta perchar en los árboles. Vimos el primer ejemplar al llegar al centro de visitantes. Sin embargo, no siempre fue así. Cuentan Howell & Webb, autores del clásico libro sobre aves de México y norte de Centroamérica, en su primera edición de 1995: “Hasta hace poco solo se conocía de 11 especímenes, el más reciente tomado en 1950. Redescubierto en junio de 1988 en el alto Valle del río Aguan”[2]. Este comentario permite valorar el esfuerzo que ha tomado su conservación.

El Amazilia luciae se ha observado en otros departamentos de Honduras: Olancho, Santa Bárbara y Lempira; hay registros aislados en Cortés en eBird, la base de datos de aves más reconocida a nivel global.
ACERCA DE LA FAUNA Y FLORA EN EL BOSQUE TROPICAL MUY SECO
En cuanto al reino vegetal, de las 11 especies endémicas que existen en las zonas de bosque seco tropical en Honduras, nueve se encuentran en el biotopo del colibrí esmeralda cercano a Olanchito[3]. De ellas, cuatro son endémicas del valle del río Aguán: Stencereus yunckeri, Capparis admirabilis, Opuntia hondurensis y Eugenia coyolensis.

Además, se observan otras especies, capaces de sobrevivir en el área del polígono de tiro de la Fuerza Aérea Hondureña donde habita el Amazilia luciae.

Existe, además, un reptil endémico del mismo biotopo: el Ctenosaura melanosterna, el jamo negro, una iguana oscura, que sólo se ve en el Departamento de Yoro y en los Cayos Cochinos en el Caribe hondureño. Es famoso pues en Olanchito se celebra todos los años el Carnaval del Jamo, una fiesta popular que incluye desfile de carrozas, música y exposiciones, dedicada desde 1988 a san Jorge, patrón de La Ciudad de los Escritores hondureña.

VIDEOS DEL COLIBRÍ ESMERALDA
VISITAR LA ZONA

Para los amantes del aviturismo, todo el camino desde San Lorenzo Arriba hasta Olanchito tiene innumerables sorpresas; sin embargo, el mayor tesoro es observar el Amazilia luciae en su propio entorno. Si puede visitar la zona, no dude en buscarlo. Puede hallarlo en pleno vuelo o posándose en una rama en cualquier momento.
© Pablo R. Bedrossian, 2018. Todos los derechos reservados.
AGRADECIMIENTOS
A Felipe Reyes de Proyecto Aldea Global, por la invitación. A toda la gente de la aldea San Lorenzo, vecina a Olanchito, por su maravillosa cordialidad.
A Romel Romero por la revisión de esta nota y sus valiosas sugerencias, así como por sus fotografías que generosamente cedió en forma gratuita para esta nota.
A José Luis Ramos quien nos recibió en nombre de ASIDE en el Refugio de Vida Silvestre Colibrí Esmeralda Hondureño y contribuyó a este artículo con la identificación de las plantas, arbustos y árboles que fotografiamos durante nuestra visita.
REFERENCIAS
[1] http://asidehonduras.org/colibri-esmeralda-hondureno/. ASIDE, una ONG local, es la responsable de la protección y conservación del Refugio de Vida Silvestre Colibrí Esmeralda Hondureño (RVSCEH) que tiene un convenio de co-manejo con el Instituto Nacional de Conservación y Desarrollo Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre (ICF) y las Municipalidades de Arenal y Olanchito.
[2] Howell, Steve y Webb, Sophie, “A Guide to the Birds of Mexico and Northern Central America”, Oxford Press University, 1ra. Edición, 1995, p.409
[3] Según el DECRETO OFICIAL No.159-2005 publicado en La Gaceta de la República de Honduras el 9/11/2005. Desde luego, si ben no es una publicación científica, el decreto se basa en información provista por especialistas en biología.
CRÉDITOS MULTIMEDIA
Todas las fotos y videos pertenecen al autor y es el dueño de todos sus derechos a excepción de las tres fotografías en las cuales se indica que su autor es Romel Romero.
BIBLIOGRAFÍA
Gallardo, Robert J., “Guide to the Birds of Honduras”, Mountain Gem Tours, 2014
Howell, Steve y Webb, Sophie, “A Guide to the Birds of Mexico and Northern Central America”, Oxford Press University, 1ra. Edición, 1995
Fagan, Jesse & Oliver Komar “Peterson Field Guide to Birds of Northern Central America”, Peterson Field Guides, 2016