Hace muchos años, por pura casualidad, descubrimos el Barrio Monseñor Espinosa. Nos sorprendió encontrar en Barracas un pequeño barrio cerrado con calles interiores, amplios espacios arbolados y una construcción homogénea, cuidada y atractiva.
Ocupa la mitad oeste de la manzana delimitada por las calles Perdriel, Alvarado, California y Santa Elena; en la otra mitad se encuentra el edificio de Editorial Perfil. Un gran arco rojizo en Perdriel 1250 enmarca la entrada principal; hay otros accesos más pequeños por las calles Alvarado y California.
LA HISTORIA
Debido al importante flujo migratorio, desde fines del siglo XIX el déficit habitacional en la ciudad de Buenos Aires se volvió un asunto crucial. Las propuestas para resolverlo incluían viviendas económicas, casas colectivas y barrios obreros.
Como ya hemos escrito[1], En 1912 el diputado Juan Félix Cafferata presentó en el Congreso un proyecto de casas para obreros. En 1917 se reglamentó la ley. Manejado por la flamante Comisión Nacional de Casas Baratas (CNCB), en 1920 se inauguró el primer proyecto residencial de gestión pública con finalidad social: un complejo de 160 viviendas económicas, cerca del Parque Chacabuco, zona conocida hoy como Barrio Cafferata en honor a su impulsor. Fueron nueve intervenciones en total en la Ciudad de Buenos Aires, con un total de 891 viviendas, entre individuales y colectivas. La últimas fueron el Barrio Rawson en 1934, situado en Agronomía, la Casa América sobre la actual avenida Belgrano, a pasos del Bajo, en 1937 y la Casa Colectiva Patricios en 1939, vecina a una de las primeras, la Casa Colectiva Valentín Alsina, inaugurada formalmente en 1921[2].
Al mismo tiempo, organizaciones católicas, muy fuertes en aquella época, coincidieron en el propósito de solucionar la creciente falta de viviendas. Por ejemplo, el microbarrio La Colonia, en el extremo sudoeste de Parque Patricios, levantado entre 1910 y 1914[3] y la Colonia Obrera de Pompeya, construida entre 1912 y 1926[4] por iniciativa de la Sociedad San Vicente de Paul. Dentro de este contexto podemos ubicar el Barrio Monseñor Espinosa.
LA CONSTRUCCIÓN
El Barrio Monseñor Espinosa se erigió sobre un terreno donado por Leandro Pereyra Iraola. Hasta donde hemos podido averiguar, los recursos económicos provinieron de la Unión Popular Católica Argentina (UPCA), un emprendimiento social manejado por obispos, que, como hemos escrito en otra nota, también tuvo a cargo el microbarrio Mihanovich de Parque Avellaneda[5]. La UPCA organizó una gran colecta en 1919 cuyos fondos destinó, entre otros fines, a viviendas para personas de escasos recursos. Parte de esos recursos fueron destinados a la construcción del barrio, que se inició en 1917 y se concluyó en 1923.
El diseño estuvo a cargo del arquitecto Carlos Cucullu Curuchet y la construcción fue llevada a cabo por la empresa constructora J. y S. Sabaté, tal como dan testimonio inscripciones en sus fachadas. Se trata de 64 viviendas de dos plantas distribuidas en 8 pabellones rodeados de espacios abiertos y árboles que le dan apariencia de jardín. Si bien muchas de las fachadas perdieron su fisonomía original, aún conservan rasgos originales que le confieren una notoria unidad.
LAS VIVIENDAS
Las casas fueron concebidas para familias numerosas, algo habitual para la época. Cada una contaba con amplios dormitorios, una espaciosa cocina, un gran baño y un patio. En el barrio funcionaron una despensa (en una construcción aparte), un almacén, una ferretería y una farmacia[6].
Según hemos leído, inicialmente las viviendas se alquilaban bajo la administración de la Acción Católica[7]. Sin embargo, tiempo después, se abrió para los inquilinos la posibilidad de adquirirlas. Muchas familias pese a disponer recursos insuficientes, pudieron cerrar la compra gracias al apoyo financiero de la cooperativa El Hogar Obrero.
EL NOMBRE
El nombre homenajea al arzobispo de Buenos Aires de aquel momento, Mariano Antonio Espinosa, impulsor de las donaciones para el proyecto, quien falleció el mismo año de la inauguración.
Buenos Aires tiene múltiples tesoros y el Barrio Monseñor Espinosa es uno de los más curiosos y menos conocidos. Si va por Barracas, dese una vuelta y visítelo, así podrá comprobarlo.
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REFERENCIAS
[1] Ver nuestro artículo “La Casa América, viviendas al alcance de todos”, 13/7/2020, https://pablobedrossian.com/2020/07/13/la-casa-america-viviendas-al-alcance-de-todos-por-pablo-r-bedrossian/
[2] Aunque fue construida en 1919, la inauguración vecinal tomó dos años más. Ver: sin firma, “Sitios de interés cultural – Casa Colectiva Valentín Alsina”, Comisión para la Preservación del Patrimonio Histórico Cultural, Ciudad de Buenos Aires, sin fecha, https://buenosaires.gob.ar/areas/cultura/cpphc/sitios/detalle.php?id=126
[3] Ver nuestro artículo “Plazoleta Francisco López Torres: un pedacito de París en Parque Patricios”, 7/6/2021, https://pablobedrossian.com/2021/06/07/plazoleta-francisco-lopez-torres-un-pedacito-de-paris-en-parque-patricios/
[4] Ver nuestro artículo “La Colonia Obrera”, 17/2/2017, https://pablobedrossian.com/2017/02/17/la-colonia-obrera-por-pablo-r-bedrossian/
[5] Ver nuestro artículo “El barrio Mihanovich, un secreto al alcance de todos”, 17/11/2023, https://pablobedrossian.com/2023/11/17/el-barrio-mihanovich-una-perla-portena-desconocida/
[6] Parise, Eduardo, “El elegante barrio cerrado de Barracas”, Diario Clarín, 24/04/2016, actualizado al 27/05/2020, https://www.clarin.com/ciudades/elegante-barrio-cerrado-barracas_0_EJWEKr8eW.html
[7] Mejía, Virginia, “Monseñor Espinosa: las casitas para trabajadores que hoy conforman un pintoresco barrio privado en Barracas”, 2/6/2021, https://www.lanacion.com.ar/buenos-aires/monsenor-espinosa-las-casitas-para-trabajadores-que-hoy-conforman-un-pintoresco-barrio-privado-en-nid01062021/
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