Serie CONFIESO QUE HE LEÍDO
Hoy las novelas de intriga parecen guiones de películas. Las circunstancias, los dilemas, la acción y los diálogos se conjugan para crear secuencias cinematográficas donde el lector imagina los escenarios y los protagonistas. Si a Ud. le gusta ese tipo de novelas, “Tiempo Pasado” le va a encantar.
Está protagonizada por Jack Reacher, el mismo personaje que fuera llevado al pantalla grande por Tom Cruise. Creado por Lee Child, autor de esta novela, aparece ahora como un expolicía militar que decide emprender un viaje desde Maine a California. A poco de iniciar el camino decide entrar a un pueblito donde vivieron sus abuelos. Pueblo chico, infierno grande. No hace falta ser muy suspicaz para imaginarse que no será una visita sin contingencias.
Al mismo tiempo una pareja canadiense de viaje hacia la Florida sufre un percance con su auto y decide pasar la noche un hotel en las cercanías. Son los únicos pasajeros y parecen vivir el “Día de la Marmota” pues no logran salir de allí a pesar de sus esfuerzos. Desde luego, hay una razón oculta, pero la ignoran. No es ingenuidad, es la confianza traicionada mientras dormimos.
Ambas historias se cruzan, aumentan la tensión y se resuelven en una trama notable de acción y suspenso. Como puede inferir el lector no está en juego el destino de los Estados Unidos o una conspiración internacional. Son dos historias sencillas, de esas que quizás logran ocupar la primera plana de un diario local, pero duran lo que una tormenta de verano. Entonces, ¿en qué reside los méritos de la novela? En la extraordinaria pluma de Lee Child que, aún tratándose de una traducción, le imprime intriga, acción y emoción a cada capítulo. Leímos sus 450 páginas en cuatro días, usando nuestros escasos ratos libres. “Tiempo Pasado” no se lee, se devora, porque el autor nos entrega grandes relatos a partir de dos pequeñas historias.
© Pablo R. Bedrossian, 2021. Todos los derechos reservados.