La República de Uganda es un pequeño país (241,038 km2), sin salida al mar, ubicado en el centro este de África. Su población es de alrededor de 50 millones de habitantes que pertenecen a 52 etnias que conviven en paz.
Es una nación mayoritariamente cristiana. Conformada por siglos como un conjunto de reinos, a partir de 1894 se constituyó en un protectorado inglés, del cual se independizó en 1962. La herencia inglesa perdura en el idioma oficial (el inglés, junto al swajili), en los autos con volante a la derecha y la recordada influencia de los misioneros, en particular en la educación.
El mundo conoce de Uganda por dos hechos trágicos: la dictadura de Idi Amín, acaecida entre 1971 y 1979, y la famosa toma de rehenes durante un vuelo de Air France realizada por terroristas palestinos y alemanes en 1976, que tenía como blanco los pasajeros judíos. El avión aterrizó en Entebbe, la capital de Uganda, y fuerzas de élite del ejército israelí, actuando por sorpresa, rescataron a la inmensa mayoría de los secuestrados. El valiente pueblo ugandés superó estas tragedias y siguió luchando por subsistir en medio de difíciles condiciones.
Actualmente el 80% se encuentra debajo de la línea de pobreza. El PIB per cápita anual en 2022 fue de USD 964.40[1] (unos USD 80 mensuales) Es común ver a personas recorrer grandes distancias para llevar agua a sus casas en viejos botes amarillos. La desocupación es de alrededor de un 60%; muchos viven de trabajos informales. Sus principales actividades económicas son la agricultura -sobre todo, el café- y el turismo, pero un extranjero me comentó que en la actualidad el negocio más atractivo es el del oro.
Lo que nos llevó a conocer Uganda fue su extraordinaria naturaleza; en particular la presencia de grandes mamíferos, como los leones y los elefantes, y la existencia de especies muy difíciles de observar en libertad, como los gorilas de montaña y los chimpancés. Sus parques nacionales, en particular los que presentan ecosistemas de sabana, como el Murchison Falls o el Queen Elizabeth, permiten admirar en forma directa una biodiversidad que solo conocíamos por videos o revistas especializadas. Presentamos aquí las especies más interesantes que hemos podido admirar y algunas de nuestras experiencias al entrar en contacto con ellas.
LOS CINCO GRANDES: LEÓN, LEOPARDO, ELEFANTE, JIRAFA Y BÚFALO EN LOS PARQUES NACIONALES MURCHISON FALLS Y QUEEN ELIZABETH
En el Parque Nacional Murchison Falls se encuentran unas imponentes cascadas con una caída de 43 metros que corresponden al río Nilo, cuyo nacimiento -según nos explicaron- se encuentra en el Lago Victoria.
Allí pudimos contemplar los Big Five del parque: león, leopardo, elefante, jirafa y búfalo. En el Parque Nacional Queen Elizabeth pudimos observar algunas de estas magníficas especies aún más de cerca.
Obviamente los animales más buscados por los visitantes son los leones; aunque los vimos en ambos parques, en el Queen Elizabeth llegamos a ver ocho en un mismo día. Dos de ellos estaban en medio del camino y solo se movieron cuando vieron que un elefante en actitud intimidante se les acercaba.
De los Big Five, el más difícil de ver es el leopardo. Tuvimos oportunidad de ver de cerca (a unos diez metros) un magnífico ejemplar descansando en un árbol en el Murchison Falls.
Los safaris se realizan en vehículos 4 x 4 cuyo techo se levanta para poder observar y fotografiar con comodidad los animales y está terminantemente prohibido ir a pie.
EL SANTUARIO DE RINOCERONTES BLANCOS EN ZIWA
El Ziwa Rhino Sanctuary fue creado en 2005 para reintroducir en Uganda el rinoceronte blanco, una especie que se encontraba extinta en el país desde 1982. Con una pareja donada por Animal Kingdom, de la empresa Disney, y dos parejas adquiridas en Kenia se llevó adelante esta iniciativa que a la fecha cuenta con 41 rinocerontes; al llegar a los 50 se iniciará el proceso de liberarlos en parques nacionales. Estos rinocerontes son inmensos. Los adultos llegan a pesar 3 toneladas y pueden medir algo más de cuatro metros con una altura de hasta 1.85 metros.
Primero observamos cuatro ejemplares (padre, madre y dos crías) y luego tres juveniles. No es posible acercarse demasiado pues son animales peligrosos, pero pudimos fotografiarlos desde unos 15 metros.
LA BÚSQUEDA DE CHIMPANCËS EN EL KIBALE FOREST NATIONAL PARK
El tracking de estos animales requiere un permiso otorgado por el gobierno. La experiencia se realiza en grupos pequeños acompañados por guías del parque; delante van rangers (exploradores) que buscan familias de chimpancés e informan a los guías por radio de donde se encuentran.
Aunque generalmente no bajan de los árboles, en nuestro caso, nos sorprendió el primer macho que observamos, descansando sobre la hierba a unos dos metros de nosotros. Era el vice alfa del grupo; medía unos 1,65 metros, pesaba 60 kilos y tenía 32 años (esta especie llega a los 50 años y en cautiverio hasta los 60 años, debido a los cuidados adicionales, alimentación y medicinas).
Había unos 15 o 20 más en un árbol (en el parque hay 1450 chimpancés distribuidos en 15 clanes o familias). Luego bajó un macho juvenil a hacerle grooming (quitarle pulgas, piojos y otra alimañas de la piel, uno por uno). Finalmente, encontramos al macho alfa también en el suelo, a unos tres metros nuestro. Tras hacer sonidos extraños que primero parecían una letanía, luego unos ruidos guturales y finalmente alaridos, salió corriendo a una tremenda velocidad; alguien nos dijo que era su forma de intimidar a su grupo y afirmar su liderazgo.
LA BÚSQUEDA DE GORILAS DE MONTAÑA EN EL BWINDI IMPENETRABLE NATIONAL PARK
También para el tracking de gorilas de montaña se debe pagar un permiso especial con antelación (en Ruanda, el mismo permiso cuesta más del doble que en Uganda). La admisión se reduce a pocas personas por día, evitando un excesivo contacto humano de estos sobrevivientes de la cacería furtiva y la complicidad oficial denunciadas Dian Fossey (recordada en la película “Gorilas en la niebla”). El día de nuestra visita éramos solamente dos grupos de 8 personas cada uno.
Para observarlos es necesario entrar a la jungla y abrirse paso a filo de machete en medio de subidas y bajadas, sobre un piso barroso cubierto de una espesa vegetación. Delante nuestro iba un guía y dos personas armadas con AK 47 (nos decían que ante la repentina aparición de animales salvajes, como elefantes del bosque, los utilizan para espantarlos mediante disparos al aire) mientras dos avezados rangers realizaban la búsqueda.
Después de una hora encontramos una familia, incluyendo el macho alfa: el espalda plateada, una inmensa mole que pesa unos 180 kilos. Nos pareció gigantesco, aunque nos dijeron que la altura máxima es de 1,80 metros y que el que observamos medía 1,65. Esto se debe a que sus patas son cortas, pero lucen una enorme e intimidadora caja torácica con larguísimos y gruesos brazos. Primero el macho descansó, luego le fue a hacer grooming a una de las hembras y recién al final lo pudimos ver claramente porque se puso de frente y se movilizó para alimentarse. Nos explicaron que la manada que dirigía estaba conformada por 10 ejemplares de los cuales vimos 9.
Nos exigieron el uso de mascarillas para evitar cualquier tipo de contagio. Un dato adicional es que los gorilas viven unos 35 años.
LOS HIPOPÓTAMOS Y OTRAS ESPECIES EN EL CANAL KAZINGA
El Kazinga es un canal natural de 32 km de largo y unos 750 metros de ancho que une el lago Edward con el lago George. Forma parte del Parque Nacional Queen Elizabeth y se caracteriza por una fauna extraordinaria, que hace del paseo en lancha una de las actividades más solicitadas.
Su profundidad promedio es de 2.5 metros y es el sitio de mayor población de hipopótamos a nivel mundial, pues habitan allí unos 3000 ejemplares. Además, hay numerosos cocodrilos del Nilo, otros reptiles y y una amplia variedad de aves. Es común, además, observar familias de elefantes bañándose allí.
LAS CEBRAS Y OTRAS ESPECIES EN EL LAKE MBURO NATIONAL PARK
En el Mburo National Park, tal como en otros parques, hay una gran cantidad de jirafas, búfalos y warthogs (cerdos salvajes parecidos a los jabalíes) pero es el único que ofrece la posibilidad de observar cebras, que lo habitan en gran cantidad.
Como en todos los parques, la cantidad y variedad de antílopes.
Observamos también hipopótamos que saliendo del agua pernoctaban muy cerca nuestro.
Además, pagando un permiso es posible caminar en ciertos sectores del parque con un guía armado para observar de cerca a los animales.
MONOS Y MANDRILES EN TODAS PARTES
En todo el territorio de Uganda hay una amplia variedad de primates. Hay una especie de mandril que vimos en casi todo nuestro recorrido, el Olive Baboon.
Además, vimos diversas especies de monos que nos resultados muy interesantes, algunas en un bello jardín boscoso llamado Bigodi Community Turaco Trails, cercano al Kibale National Park.
ALGUNOS REPTILES
A hablar de los hipopótamos en el Kazinga channel, mencionamos a los cocodrilos del Nilo y el Nile Monitor, los reptiles más grandes del país.
Tuvimos también la suerte de admirar dos especies de camaleones, el más hermoso en Bweza Gorilla Lodge, muy cerca del Bwindi Impenetrable National Park, donde observamos los gorilas.
AVES EXTRAORDINARIAS
Uganda cuenta con cerca de 900 especies de aves[2], muchas de ellas de gran tamaño o espléndido colorido. Uno de los santuarios de aves lo constituye el Lago Bunyonyi con sus 29 islas. Visitamos una de ellas, la isla Kyahugye, la segunda en tamaño, con cuenta con una magnífica biodiversidad.
Todo el territorio ugandés está poblado de aves maravillosas, aunque en particular los parques nacionales albergan la mayor cantidad de especies. Compartimos las imágenes de algunas de ellas.
Uganda es un paraíso natural, digno de visitarse al menos una vez en la vida.
© Pablo R. Bedrossian, 2024. Todos los derechos reservados.
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REFERENCIAS
[1] PIB per cápita (US$ a precios actuales), Año 2022, Banco Mundial, https://datos.bancomundial.org/indicator/NY.GDP.PCAP.CD
[2] “Uganda”, eBird, https://ebird.org/region/UG?yr=all
Pablo Bedrossian 