Un viaje por la arquitectura inglesa, la historia del Ferrocarril del Sud y las voces que aún resuenan en un rincón olvidado de Barracas. Entre leyendas, antiguas construcciones y un eco del Zorzal Criollo, recorremos un microbarrio que guarda secretos que merecen ser contados.
👉 ¿Conoce la Colonia Sola, aquel conjunto de viviendas ferroviarias escondido en Barracas? Lo invitamos a descubrir con nosotros un rincón donde la memoria aún respira entre ladrillos rojos y calles empedradas con aroma inglés.
De niños practicábamos Yudo en el Club Independiente de Avellaneda. Para ir hasta la sede tomábamos el colectivo 95. En su recorrido nos llamaba la atención un complejo de antiguos edificios de dos plantas, de estilo inglés, ubicados sobre la calle Australia, una avenida ancha que por aquel entonces era empedrada.
Por la noche, quizás por la tenue iluminación, el aspecto era fantasmagórico. Tenía el delicioso encanto de lo decadente.
LA HISTORIA
La historia del microbarrio conocido como Colonia Sola está íntimamente ligada a la llegada del ferrocarril. En septiembre de 1853 un grupo de argentinos se unió para crear la primera línea de trenes local; una ley de enero de 1854 le otorgó la concesión para explotarla. Tres años y medio después, el 29 de agosto de 1857 se realizó el viaje inaugural en la mítica locomotora La Porteña[1].
El nacimiento de la república imprimió a la economía argentina un ritmo vertiginoso. El incremento del comercio y de las exportaciones de carnes y granos requirió el desarrollo tecnológico que facilitara su transporte. Entre 1870 y 1914 se construyó una enorme red ferroviaria, concentrada en la región pampeana, donde todas las rutas confluían en Buenos Aires, el puerto de salida. Para financiar estos proyectos arribaron capitales principalmente ingleses y también franceses. El ferrocarril fue palanca del desarrollo y poblamiento del territorio del país[2].
La Estación Sola era una estación de cargas del Ferrocarril del Sud (luego del Ferrocarril General Roca) ubicada en un extenso terreno adquirido a la familia Spinetto[3], delimitado por la calle Gral. Gregorio Aráoz de Lamadrid, la Avenida Vélez Sarsfield, la calle Toll, dos segmentos de la calle Perdriel, la avenida Suárez, la avenida Pinedo y la calle Australia. Cuenta el experto Adolfo Brodaric “Los primeros talleres del Ferrocarril del Sud funcionaron en un predio adyacente a la estación Avellaneda, entre la Avenida Pavón y el Riachuelo. Hacia 1877 se compran los terrenos de Sola con el fin de trasladar allí los talleres y establecer una estación de cargas, inaugurándose los primeros galpones en 1882. Debido al crecimiento de la empresa, y resultando insuficientes las instalaciones de Barracas, se resuelve en 1898 encarar la construcción de los nuevos Talleres Banfield, quedando Sola como estación de cargas”[4].
En un artículo publicado en el Diario La Nación, Virginia Mejía indica que la Colonia Sola toma su nombre de la estación de carga y adjudica la creación al empresario británico George Wilkinson Drabble[5], quien fungiera como miembro del directorio del Ferrocarril del Sud, además de accionista de Ferrocarril Central Argentino y presidente del Ferrocarril Campana (empresa que desarrolló el ramal Buenos Aires-Rosario)[6]. Si bien no encontramos evidencia documental que confirmara esta atribución, es muy probable que así sucediera.
LA COLONIA SOLA Y SU ARQUITECTURA
La Colonia Sola fue creada para los trabajadores del Ferrocarril del Sud (no para sus directivos que vivían zonas como Banfield o Temperley). Aunque se ha postulado el año 1889 como su fecha de nacimiento, una placa colocada en el lugar celebrando su 110º aniversario indica que fue levantada en 1903.
Ocupa el extremo sudoeste del predio, sobre la actual calle Australia a la altura del 2700 y la esquina de uno de los segmentos de la calle Perdriel (el otro se encuentra del lado de la avenida Suárez). También en uno de los edificios encontramos un pequeño cartel con la inscripción Año 1906.
Cuenta con 71 viviendas distribuidas en cuatro pabellones de dos plantas con típico estilo funcional inglés: ladrillo rojo oscuro a la vista en muros y chimeneas, techos de tejas a dos aguas y falsos pans de bois (ornamentos de madera entramada). Los edificios cuentan con galerías perimetrales en ambas plantas y balcones en el piso superior. Los desagües pluviales de hierro fundido están a la vista.
Con una superficie de más de 8.000 m2, la Colonia Sola cuenta con dos calles internas empedradas y un vetusto mástil en su cruce. Su aspecto exterior se encuentra muy deteriorado, denotando una falta de mantenimiento riesgosa para sus habitantes
ÁREA DE PROTECCIÓN HISTÓRICA Y ASPECTOS LEGALES
Por la Ley N° 459 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), sancionada en el año 2000, se creó el Programa de Rehabilitación del Conjunto Habitacional Colonia Sola, enfocado en resolver la problemática habitacional, legal y edilicia de las familias que allí residen. La ley obliga al Poder Ejecutivo de la Ciudad a la transferencia de dominio del lugar a la Asociación Mutual Colonia Sola mediante la firma del respectivo boleto de compraventa, a la subdivisión en propiedad horizontal del conjunto habitacional -paso necesario para que cada familia pueda obtener la escritura individual de su unidad funcional- y a la ejecución de obras de infraestructura para mejorar sus precarias condiciones. Hasta donde sabemos la aplicación de esta ley ha sido lenta, parcial y problemática. La lucha de los vecinos continúa.
Otro dato a tener en cuenta es la Ley N° 2.447 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), sancionada en 2007; si bien no se refiere al Conjunto Habitacional Colonia Sola, actúa sobre el contexto urbanístico circundante -la vecina Estación Hipólito Yrigoyen y el viaducto del ferrocarril General Roca (la obra que eleva las vías del tren a su paso por Barracas)-, modificando un anexo del Código de Planeamiento Urbano e incorporando la zona a las Áreas de Protección Histórica (APH). Hoy la Colonia Sola aparece en el Listado de Inmuebles Catalogados[7] APH9 como Conjunto Colonia Sola, con nivel de protección, que da como direcciones Av. Australia 2725 / 77 y Perdriel 1046/50.
EL NOMBRE
Aunque hay quienes postulan que el nombre deriva de Eduardo Sola (1805-1888), un destacado terrateniente y político argentino del siglo XIX, es mucho más probable que corresponda al Ing. José Andrés Sola, ingeniero, inspector y posteriormente director de explotación del Ferrocarril del Sud (FCS) en la segunda mitad del siglo XIX. La asignación de nombres de personalidades destacadas del desarrollo ferroviario a estaciones de tren tiene antecedentes; por ejemplo, la Estación Llavallol recibió su nombre por don Felipe Llavallol.
UNA ANÉCDOTA
Se ha relacionado la arquitectura de la Colonia Sola con el East End londinense y con barrios de obreros de Liverpool. Durante nuestra visita a la ciudad de los Beatles[8] mantuvimos una interesante conversación con un anciano quien, al enterarse de nuestra nacionalidad argentina, nos relató una curiosa historia vinculada a la Colonia Sola.
Su bisabuelo, siendo un joven ingeniero ferroviario, fue enviado a Buenos Aires a trabajar en los talleres de la Estación Sola del Ferrocarril del Sud. Hacía muy poco se había inaugurado la Colonia Sola. La hija de un operario que residía allí era frecuentada por un joven que vivía del otro lado de la ciudad. Se organizó un concurso de canto en una sociedad de fomento o club de barrio de Barracas -según le entendimos- y el joven decidió participar. Su actuación fue brillante y ganó el primer lugar. El cantor de pelo engominado celebró su victoria junto a su novia y los vecinos de la Colonia Sola. Era nada menos que Carlos Gardel. Su bisabuelo participó de la fiesta.
Cuando, al poco tiempo, el Zorzal Criollo comenzó a actuar en bares y cafés, la joven decidió cortar la relación pues le parecía vergonzoso que su novio dedicara la vida a la noche porteña. Algunos dicen que “El día que me quieras”, cuya letra no es de Gardel sino de Alfredo Le Pera, estuvo dedicada a Rosita Moreno y otros a Isabel del Valle. nosotros nos gusta pensar que fue para aquella joven anónima de la Colonia Solá.
© Pablo R. Bedrossian, 2025. Todos los derechos reservados.
REFERENCIAS
[1] Ver Nuestro artículo “Enrique Santos Discépolo: el único pasaje en S de Buenos Aires”, 18/01/2019, https://pablobedrossian.com/2019/01/18/enrique-santos-discepolo-el-unico-pasaje-en-s-de-buenos-aires-por-pablo-r-bedrossian/
[2] Sin firma, “Historia de los Ferrocarriles en Argentina”, 2012, p.8, https://cdi.mecon.gob.ar/bases/docelec/mb1051.pd
[3] Alonso de Rocha, Aurora, “Olavarría, Una linda historia de trenes” en “Historia Ferroviaria”, Asociación de Amigos y Amigas del Instituto y Archivo Histórico Municipal de Morón, 2012, p.161
[4] Bordaric, Adolfo, “Talleres y Colonia Sola del antiguo Ferrocarril del Sud”, en “Patrimonio
arquitectónico argentino – Memoria del Bicentenario (1810-2010)”, Tomo II (1880-1920), Parte 2, dirigido por Alberto Petrina y Sergio López Martínez, 2014, p.551
[5] Mejía, Virginia, “Colonia Sola, un rincón de Liverpool oculto (y olvidado) en pleno Barracas”, 29/7/2021, https://www.lanacion.com.ar/buenos-aires/colonia-sola-un-rincon-de-liverpool-oculto-y-olvidado-en-pleno-barracas-nid29072021/
[6] Sin firma, “George Drabble, un burgués moderno y visionario de ambos márgenes del Río de la Plata”, Diario Actualidad, General Villegas, Pcia. de Bs.As.19/07/2020, https://diarioactualidad.com/blog/2020/07/19/george-drabble-un-burgues-moderno-y-visionario-de-ambos-margenes-del-rio-de-la-plata-se-instalo-el-primer-frigorifico-de-sudamerica-el-river-plate-fresh-meat-company/
[7] “Código Urbanístico, Anexo 1, Listado De Inmuebles Catalogados”, Apartado 1.12, SECDU, Secretaría de Desarrollo Urbano, 31/12/2022, p.43
[8] Ver nuestro artículo “Liverpool: por la ruta de los Beatles”, 20/5/2022, https://pablobedrossian.com/2022/05/20/liverpool-por-la-ruta-de-los-beatles/
Pablo Bedrossian 