“EL PADRINO (Parte 2)” (por Pablo R. Bedrossian)

Serie GRANDES PELÍCULAS

Título: El Padrino (Parte 2)

Director: Francis Ford Coppola

Año: 1974

Protagonistas: Al Pacino (“Michael Corleone”), Robert de Niro (“Vito Corleone” joven), Robert Duvall (“Tom Hagen”), Diane Keaton (“Kay Adams”), Talia Shire (“Connie Corleone”), John Cazale (“Fredo Corleone”), Lee Strasberg (“Hyman Roth”), Michael V. Gazzo (“Frank Pentangeli”)

“El Padrino II” es, a la vez, una secuela y una precuela de “El Padrino” pues retoma el relato con el nuevo padrino Michael Corleone en 1953 y lo sigue hasta alrededor de 1960; pero también regresa al pasado para mostrar los momentos más significativos de la niñez y juventud de su padre, Vito Corleone.

Lanzada solo dos años después que «El Padrino», comienza en Corleone, el pueblo de Sicilia donde el padre de Vito es asesinado por el capo local ante su negativa a someterse. Lo mismo le ocurre a su hijo mayor, un adolescente, que había jurado vengarse. La desconsolada madre va a la casa del capo a pedir clemencia por el pequeño Vito, que es lo único que le queda. Cruelmente, la mujer es también asesinada allí mismo, mientras le grita a su hijo que huya. De inmediato la historia regresa al presente: la fiesta del bautismo del hijo de Michael Corleone en Nevada, a donde la familia ha trasladado sus negocios. Como en la boda de Connie de “El Padrino”, la espléndida ocasión es la oportunidad para reuniones mafiosas llenas de pretensiones y suspicacias. Es el comienzo de una trama de intrigas, negocios y asesinatos, en la que se intercalan fragmentos de la historia de Vito: su llegada a Nueva York en 1901, su vida dentro de la comunidad italiana neoyorquina a partir de 1917, su ascenso dentro de ella hasta convertirse en una autoridad respetada y temida y, finalmente, el regreso a su pueblo natal para reencontrarse con el asesino de su familia.

El guion gira alrededor de dos grandes ejes: la historia familiar con sus complejas relaciones y los negocios sucios marcados por el dinero, el poder, y la violencia. Mafia y familia se convierten en sinónimos de ambiciones, traiciones y venganzas.

Como su entrega anterior, “El Padrino II” es una joya cinematográfica, no solo por el cuidado de los detalles sino por mantener en vilo al espectador sin baches, golpes bajos o vulgaridades. Escenas como la fiesta mencionada, la procesión de San Genaro en Little Italy, las vistas de los hoteles art deco de Miami, los clubes nocturnos de La Habana o las sesiones ante un comité del Senado de los Estados Unidos poseen una extraordinaria ambientación, acompañada de excelentes música y fotografía. El film no solo cuenta con un reparto estelar: las actuaciones son monumentales, probando que la dirección de Francis Ford Coppola abrió el camino para un nuevo cine.

Aunque quizás no sea necesario decirlo, la película obtuvo 6 Premios Oscar en 1975: a la Mejor Película, al Mejor Actor de Reparto (por la actuación de Robert De Niro), al Mejor Guion Adaptado, al Mejor Director, a la Mejor Banda Sonora y al Mejor Diseño de Producción. Nos parece injusto que no se le haya otorgado el Oscar al Mejor Actor a Al Pacino cuya actuación es sobresaliente.

© Pablo R. Bedrossian, 2023. Todos los derechos reservados.

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