Entrevista exclusiva con el comunicador social argentino Damián Sileo, autor de una investigación inédita sobre la figura de Jesús en el cine. Un repaso exhaustivo por más de un siglo de películas sobre Jesús, desde el cine mudo hasta las plataformas digitales.
El cine siempre se ha nutrido de grandes historias. Ha recreado gestas, tragedias y momentos cumbre, dándole un singular realismo a los hechos de pasado. Como todo arte, expone una interpretación del artista. Es imposible mostrar los sucesos tal cual ocurrieron, por lo que los guionistas, directores y actores le ponen su propio su sello.
Pocas veces un mismo acontecimiento ha sido representado de tantas maneras como la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Decenas de films han mostrado su historia de muchas maneras. “La última tentación de Cristo” de Martin Scorsese y “La Pasión de Cristo” de Mel Gibson son de las últimas, las más conocidas.

Damián Sileo, comunicador social, editor y creador de contenidos, ha realizado una investigación absolutamente original sobre el tema. Ha publicado una serie titulada “Jesús y el Séptimo Arte” donde presenta en forma cronológica todas las películas sobre Jesús desde el inicio del cine hasta nuestros días. Por ese extraordinario trabajo que hemos admirado en cada entrega, decidimos entrevistarlo:
– ¿Qué te impulsó a investigar acerca de las representaciones de Jesús en el cine? ¿Qué propósito te movió a hacerlo?
– El boom de “The Chosen” me llevó a curiosear un poco sobre algunos antepasados y una cosa llevó a la otra. Me encontré con un pequeño documental sobre la historia de Jesús llevada al cine, hecha por una comunidad católica, en la que mostraban 7 u 8 películas. Pensé que, por supuesto, no se trataba de la filmografía completa sobre Jesús así que decidí explorar hasta los albores del cine y me encontré con cortometrajes de 11 minutos del cine mudo como primeras experiencias sobre la vida del Señor llevada al cine. Hasta los hermanos Lumiére han hecho su película sobre el Salvador, siendo la más antigua de la que se tenga un registro.

Respecto a lo que movió a hacerlo, diría que como cristiano, uno siempre busca la “excusa” para mostrar a Jesús de alguna manera, así que, se podría decir que hacer esta producción, además de que el cine me apasiona, fue una linda y peculiar manera de compartir a Jesús desde un ángulo poco explorado.
– ¿Cómo llevaste a cabo la tarea? ¿Cómo sistematizaste un trabajo tan vasto?
– Al principio la búsqueda fue un poco caótica porque empecé a revolver todo cuando archivo había sobre informes acerca de Jesús en el cine. Muchos se ocuparon de eso a lo largo de los años, pero siempre tenían sesgos de carácter religioso, mayormente, como cuando te mencioné aquella breve producción periodística hecha por un grupo católico. Pero para hacer algo tan completo y tan complejo, se necesitó hurgar y linkear hasta los lugares más recónditos de la red para encontrar datos. Especialmente los relacionados con los protagonistas. Por ejemplo, hay un cortometraje de 1909 que no tiene presentación ni fin, ni créditos. Vaya uno a saber cómo habrá sido su exposición en los cines de aquél entonces, pero no me imagino hoy pagar una entrada para ver una película muda, de 11 minutos de duración, donde ni siquiera sé quiénes son los protagonistas. Cosas del amateurismo, supongo.
– ¿Qué fue lo que más te llamó la atención durante tu búsqueda?
– Muchos detalles hicieron que me detenga en ciertas búsquedas. Por ejemplo, conocer que varios actores renombrados del mundo hollywoodense han personificado a Jesús en diversos filmes. Tales los casos de Max Von Sydow, Willem Dafoe, Ewan McGregor o Cliff Curtis, y hasta encontré cierta conexión entre Batman y Jesús, ya que hubo dos actores del mundo de Ciudad Gótica que también encarnaron al Señor, tales los casos de Christian Bale (el Batman de la trilogía de Nolan) y Joaquin Phoenix (el más reciente Guasón).
La explosión del cine religioso en el México de las décadas del 40 y 50 también es digna de destacar. El reciclado de actores, que supieron personificar a Jesús en una película, y años más tarde, en otro filme, protagonizaron a otros personajes de la época. Tal el caso del mexicano Enrique Rambal, que hizo de Jesús en “El mártir del Calvario”, en 1952, y luego protagonizó a Zaqueo en el filme “Jesús, María y José”, en 1969.
– ¿Cuáles fueron las películas que más te marcaron y por qué?
– No hay dudas de que “La pasión de Cristo”, de Mel Gibson, protagonizada por Jim Caviezel, es le película de cabecera para muchísimos cristianos. La crudeza del relato llevada a las imágenes nos ha hecho valorar más el sacrificio de Cristo, con todo el significado que esa palabra tiene y que muchas veces tomamos a la ligera. Pero la reciente serie “The Chosen” nos hace llegar un Jesús más entrecasa, más compañero, más humano. Y eso me llevó, particularmente, a un conocimiento más profundo de Jesús porque, seamos sinceros, crecimos en un contexto muy Reina-Valera[1], donde romantizamos a un Jesús calmo y pasivo casi pidiendo por favor a los cambistas del templo que salgan de allí, cuando el propio texto bíblico relata un hecho cargado de una violencia que solo pude ver en “The Chosen”. Creo que Dallas Jenkins supo encontrar la manera de traernos a la pantalla a un Jesús más “entendible” y que llama más la atención de aquellos que siempre le fueron esquivos.
– Por favor, ¿podrías compartirnos algunos detalles que te conmovieron, sorprendieron o te hayan movido a reflexionar?
– Si hablo de algo que me conmovió, reitero lo dicho más arriba sobre “La pasión de Cristo”. La dureza de las imágenes ha hecho valorar a otro nivel el verdadero significado de la palabra “sacrificio”. Y algo que me sorprendió o al menos me causó curiosidad -y valga como reflexión- es que la figura de Jesús atrae a todos. Aun a sus detractores. Ha habido cineastas que no tienen nada que ver con la fe cristiana, pero sin embargo se sintieron atraídos a llevar la vida de Jesús al cine. Esto me lleva a reflexionar en que Jesús trasciende todo y sea por la razón que fuere, termina estando en boca de todos.

Otra cosa que me sorprendió es ver que hubo producciones cinematográficas acerca de Jesús realizadas en países hostiles al cristianismo, como Palestina y Rusia, y que son bastante recientes.
– ¿Y algunos que te hayan indignado y otros que te hayan hecho sonreír?
– Debo confesar que miré con prejuicio “La última tentación de Cristo”, habiendo leído antes las críticas de la iglesia acerca de que se trataba de una película blasfema. Por lo tanto, tuve como una pre-indignación hasta que entendí el guion. Como siempre sostengo, más allá de las licencias que se toman los directores, de recrear o imaginarse escenas y diálogos extrabíblicos, no se les puede pedir precisión bíblica porque se trata de eso: una película. Entonces, en este filme, el director imagina a Jesús siendo rescatado de la cruz para hacer la vida de cualquier mortal y llegar a anciano. Eso llevó a los religiosos a criticar duramente esta película tildándola de sacrílega y blasfema, e imagino que esas críticas las hicieron sin haber visto el final, donde Jesús regresa de esa especie de sueño o imaginación, y exclama la frase “Consumado es”, para expirar. Dicho esto, no olvidemos que Jesús mismo, horas antes de su calvario, le pidió al Padre que lo haga zafar de esa situación. “Pasa de mí esta copa” no es una simple frase que se le ocurrió a los evangelistas, sino un deseo lógico de un hombre que sabía lo que le iba a pasar y quería ver si existía un plan B. Entonces, todo lo que pasa en esa película entre que Jesús era supuestamente rescatado y su regreso a la cruz es, ni más ni menos, que un extenso guion de la frase “pasa de mí esta copa”.

Me hizo sonreír alguna que otra escena bizarra de “Jesucristo superstar”, un musical llevado al cine, en el que en la escena de los mercaderes del templo podía verse a tipos vendiendo tarjetas turísticas, anteojos de sol, armas, etc. Esta peli también fue bastante castigada por la crítica, casi por las mismas razones que la mencionada anteriormente.
– En tu opinión, de todas las que catalogaste, ¿qué películas recomendarías ver y por qué?
– Mi podio sería «La Pasión de Cristo», «The Chosen» y «Jesús, la vida pública». La primera, como vengo sosteniendo desde un par de preguntas anteriores, porque nos lleva a valorar el verdadero sacrificio de Cristo, en tiempos donde todo es tan relativo. La segunda, porque nos muestra a un Jesús que se acerca al de la Biblia, el que está a nuestro lado, el que empatiza, el que ríe y llora de acuerdo a las circunstancias. Y la tercera, por su exactitud bíblica, algo que a muchos cristianos les interesa en demasía.
– ¿A qué conclusiones llegaste tras completar la investigación?
– No suelo sacar conclusiones después de un trabajo así porque me gusta pensar que la misma gente, o en este caso, los mismos lectores debieran sacarla luego de hacer su propio análisis o examinar mi trabajo. Pero sí debo decir que no se vio tamaño trabajo de investigación con tanto dato histórico y tanta estadística, y si hay algo que me llenaría de satisfacción, es que este material se use en toda su dimensión para seguir hablando de Jesús a como dé lugar.
– Qué posibilidades hay que publiques un libro sobre el tema?
– Estoy trabajando, justamente, en completar este informe con más detalles y más historias para lanzar el libro.
Sin duda, esta exploración de Jesús en el mundo del cine marca un hito en la relación entre arte y fe. Invitamos a leer las 12 notas y con sus bonus en: https://vidacristiana.com/cultura-medios/jesus-y-el-septimo-arte/
Se va a sorprender.
© Pablo R. Bedrossian, 2025. Todos los derechos reservados.
NOTA:
[1] Se refiere a la traducción al español de la Biblia de Casiodoro de Reina, revisada por Cipriano de Valera, cuya actualización de 1960 es muy popular en las iglesias evangélicas
